Las cajas negras de los aviones
Las cajas negras de los aviones registran la actividad que se produce durante el vuelo y constituyen la clave para conocer las causas en caso de producirse un accidente.
El origen de las cajas negras
El inventor de estos registradores fue el científico australiano David Warren. La idea surgió mientras estudiaba el accidente de dos aviones modelo Comet.
A raíz de esto, pensó en utilizar una grabadora de voz para registrar todo lo que ocurriese en la cabina de un avión.
Con el paso del tiempo, estos registradores se han ido modificando adaptándose a las nuevas tecnologías.
Actualmente tienen que estar certificados por la Asociación Internacional de Aviación Civil (ICAO). Para ello deben someterse a unas pruebas de impacto.
¿Dónde están localizadas?
Normalmente hay dos registradores y suelen estar ubicados en la parte trasera del avión.
Uno de los dispositivos graba los datos del vuelo (altura, velocidad, trayectoria, temperatura) mientras que el otro graba los últimos 30 minutos de comunicación entre los pilotos, así como la conexión con los controladores aéreos.
¿Por qué se llaman cajas negras si son de otro color?
Se utiliza un color llamativo como el color rojo o el color naranja para que puedan ser vistas con mayor facilidad en el lugar donde se ha producido el accidente.
Hay diferentes versiones acerca de su nombre, una de ellas hace referencia al luto que significa un accidente de estas características.
Curiosidades sobre estos dispositivos
- Las baterías de la baliza de las cajas negras duran como mínimo 90 días.
- Se pueden encontrar, aunque la radiobaliza se haya quedado en silencio.
- No son cajas, sino que tienen una forma cilíndrica.
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